De izquierda a derecha: Katia Chiari, Carlos Fong, Héctor Collado, Javier Romero, Magdalena Camargo Lemieszek, Annabel Miguelena, Jairo Llauradó, Melanie Taylor, Klenya Morales, Carlos Oriel Wynter Melo, Lucy Cristina Chau, Lili Mendoza, José Luis Rodríguez Pittí, Edilberto "Songo" González Trejos, Roberto Pérez-Franco (en la pantalla, en videoconferencia desde Boston) y Gloria Melania Rodríguez.
El 13 de noviembre pasado la Asociación de Escritores de Panamá realizó el último Café Literario de la temporada 2008 con el recital de narrativa "(r)e-volución 7080" que reunió a nueve autores panameños de la generación más joven.
La selección se hizo en base a la experiencia compartida de vida: Todos nacimos entre 1971 y 1987. La mayoría somos únicamente narradores, excepto tres casos que también practicamos la poesía. Todos hemos publicado al menos un libro (algunos hasta seis) o uno en imprenta. En el grupo hay dos ganadores del "José María Sánchez", que organiza la Universidad Tecnológica de Panamá; dos ganadores del "Darío Herrera" que organiza la Universidad de Panamá; una ganadora del "Gustavo Batista Cedeño" que organiza el Instituto Nacional de Cultura de Panamá y varios ganadores de menciones honoríficas en todos esos concursos y otros, no sólo en Panamá. A todos nos unen experiencias comunes vividas durante ese tiempo turbulento de la historia de Panamá: los años de la dictadura, la represión, la censura, luego la crisis de finales de los ochenta, la invasión, el mundo globalizado, las computadoras y el internet, la fuerte influencia de la televisión por cable, de la música, el bombardeo mediático, el descrédito de muchas ideologías, el final de la guerra fría. En todos hay una búsqueda estética, creativa, de un lenguaje único, de formas de expresión literaria: un compromiso con la literatura, la búsqueda de vivir como escritor en todo momento. Ahora bien, esta búsqueda es tan personal, tan individual, que ninguno de los autores se parece al otro, ni en la temática, ni en los estilos. Se puede decir que todos parten de un principio común pero buscan destinos distintos en las obras.
Le invitamos a leer [[AQUÍ]] la crónica de esa noche escrita por Edilberto "Songo" González Trejos.